tenido que alegrar mucho el fin de semana a los directivos de Disney y Lucasfilm, pues aunque sea sólo la punta de un enorme iceberg de beneficios por merchandising y otras licencias, cuanto más alta sea esa punta mejor para todos. Sobre todo para Harrison Ford, quien incluyó en su contrato recibir un 0,5% de las ganancias en taquilla de la película de J.J. Abrams,
Además de esa pequeña porción de los beneficios del filme, el veterano actor fue un hueso duro de roer durante la fase de contratación. Los responsables del filme estaban convencidos de que Han Solo debía ser una parte irremplazable de este nuevo renacer de la franquicia, hasta el punto de pagar 25 millones de dólares a Ford por su participación. “Harrison era una pieza fundamental para que la película funcionara
Es el puente entre la vieja generación y la nueva. Fue estupendo conseguir a Mark Hamill y a Carrie Fisher, pero la película podría haber salido adelante sin ellos. No sin Harrison Ford”, ha declarado una fuente de Disney según la misma página.
Los honorarios de Harrison Ford pueden llamar la atención más aún si se comparan con los de Daisy Ridley y John Boyega, los dos protagonistas principales del filme. Cada uno de ellos habría cobrado 450.000 dólares, a lo que no pusieron ninguna pega al tratarse de una oportunidad de oro para ser las nuevas estrellas visibles de la mayor franquicia de Hollywood, con más entregas en el horizonte e innumerables contratos con marcas.
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